Patricia Ozan de 36 años, el pasado día lunes se hizo un hisopado porque había perdido el sentido del gusto y mientras esperaba el resultado, responsablemente decidió auto aislarse en su domicilio del barrio Nueva Esperanza, junto a su marido y tres hijos menores, en la ciudad de Chepes..

Lo triste de la situación es que según su relato, “desde el hospital nunca me llamaron para avisarme que di positivo, ni siquiera me preguntaron si estaba aislada”, aseguró.

La humilde madre tuvo que esperar 4 días para enterarse que había dado positivo para COVID-19. “Anoche me llamó una amiga y me contó que salía en un listado por WhatsApp que tenia coronavirus y hoy a la mañana llamé al hospital y solo me respondieron” que tome paracetamol”.

“Me cansé de esperar que me llamen del hospital, porque anoche tenia dolor de cabeza y me levanté con dolor de cabeza y los chicos con fiebre y dolor de cabeza y yo esperando para saber que medicamento les doy a mis hijos y ahora llamé a mi familia para que me traigan paracetamol”, agregó.

Patricia dijo al diario El Cronista que “no me molesta que publiquen mi nombre, me molesta que no me llamaran para saber que medicamento tomar y no automedicarme, porque yo no sé qué remedio me hace bien o mal”.

Mientras tanto, ella y su familia permanecen aisladas, aseguró la mujer. “Nos autoaislamos porque no queremos contagiar a nadie” y mencionó que no tienen dinero, ni alimentos. “Mi marido vive de changas y ahora no tenemos de donde sacar para la comida, gracias a Dios que un vecino que tiene un kiosco nos dios fiado algo de mercadería”.

El Cronista de Chepes

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