-Por Angel Flores-

Es la gran preocupación de los gobernadores peronistas, que ven en el humor social y en las encuestas, la caída en picada de la imagen del presidente Aberto Fernández. Vacunaciones VIP, el mal manejo de los tiempos de cuarentena, el lento proceso de las vacunaciones, y una economía que arrasó el bolsillo de los argentinos, son los principales motivos.

El gobierno de La Rioja también es testigo del estrepitoso escenario que, a esta altura, no sabe como remontar y sostener a un presidente que fundamentalmente perdió la credibilidad hasta de sus propios funcionarios. A esto se agrega la interna feroz alentada por su vice presidenta Cristina Kirchner, que junto con La Cámpora, minan hasta sus declaraciones en la prensa.

Según fuentes de EL FEDERAL, la mesa chica de Ricardo Quintela planea varias estrategias pensando en las próximas elecciones. Pero para esto, “es fundamental darle forma y aprobación de ‘la letra chica’ de la reforma constitucional, que esconde beneficios propios de perpetuidad en el cargo”, dijo un alto funcionario. “Va haber mucho dinero en las calles y en las bancas, y el pueblo riojano es muy manso”, insinuó.

Agregando, “hasta alguno sugirió adelantar las elecciones, pero para que todo funcione, ya no hay tiempo”, resaltó.

Según un informe elaborado por la Universidad Torcuato Di Tella y la consultora Poliarquíala confianza en el gobierno de Alberto Fernández durante febrero 2021 cayó al valor más bajo desde el inicio de la gestión, un 20% en comparación con febrero de 2020, a pesar de haber sido realizado antes del escándalo del Vacunatorio VIP en el Ministerio de Salud que derivó en la renuncia de Ginés González García. Y en abril, el índice de confianza en el Gobierno fue más bajo que el último de Macri.

Más del 61% de los consultados afirmó que desconfía del plan de vacunación y el 71% cree que deberían renunciar todos los funcionarios implicados.

El siguiente punto interrogó sobre la eventual renuncia de todos los funcionarios que recibieron la vacuna de manera irregular y el número final resultó aún más contundente: el 71% de los argentinos piensa que “deberían renunciar”. En tanto, el 18,2% no cree que sea necesario y el 10,8 no tiene una postura tomada.

Mientras muchos de los gobernadores peronistas ven cada vez más cerca un cierre total de actividades, toque de queda riguroso, y cierre de fronteras, cada uno de los gobernadores ya evalúa el costo político que va arrastrar tales medidas. Consecuencias que ya tienen en sus mochilas desde el 2020 y que no permitirán otro escenario desfavorable de cara a las PASO. De hecho, solo tres provincias acataron las ultimas medidas restrictivas de Fernández, que incluyen a La Rioja.

“Queda muy poco tiempo, y en los próximos días habrá un movimiento inusitado en la política de La Rioja”, finalizó un alto funcionario de la provincia. “no digas mi nombre, porque mi cabeza estará exhibida en la plaza de Olta”.

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